Cientos de padres fueron anoche a la escuela Esteban E. Torres en el este de Los Ángeles para pedir una mejor educación para sus hijos.

Aunque no pasaron de la puerta, porque la escuela no se abrirá hasta el próximo curso, las familias llegaron a respaldar la creación de una llamada "Zona Fortalecida", así como la expansión de las escuelas pilotos.

"Quisiéramos que la nueva escuela abra bajo este modelo", dijo María Brenes, directora de la organización comunitaria La Lucha del Pueblo.

Brenes explicó que la secundaria Esteban E. Torres, compuesta de cinco edificios, se construyó tomando en cuenta una distribución que invita a que haya "varias escuelas dentro de una".

"¿Escuela piloto, y eso qué es?", se preguntó Sara Mercero, residente de la zona que, como muchos otros padres, se siente abrumada ante la proliferación de denominaciones escolares.

Las escuelas piloto, aún estando dentro del sistema del distrito escolar, gozan de mayor autonomía, y son más pequeñas, permitiendo una forma de operación flexible. Otro rasgo que las diferencia de las chárter -escuelas operadas independientemente y que quedan fuera de la organización del LAUSD- es que cuentan con maestros sindicalizados, aunque con un contrato simplificado, que los deja más expuesto a la voluntad del director de la escuela.

"Lo importante es que consigamos mejorar. Que sea con escuelas chárter, piloto o cualquier otro modelo que aún no se haya inventado, es lo de menos", dijo Yolie Flores Aguilar, miembro de la Junta Directiva de Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD), agregando que la propuesta de Elección Libre, que ella introdujo queda abierta tanto a modalidades chárter como a piloto.

Flores Aguilar espera que dentro del plazo que termina este lunes 16 de noviembre se reciban suficientes propuestas para crear un paquete final que se presentaría a mediados de enero del año próximo,

"No podemos continuar con tasas de graduación de secundaria de un 45% en esta zona", expresó Alejandra Muñoz, residente del este de la ciudad.

Debido al hacinamiento existente, los más de 4,500 estudiantes de Garfield están sometidos desde 1991 a un sistema de turnos que requiere descansos intermitentes de dos meses. Sólo dos tercios del total se encuentran en período activo en cualquier momento dado del año escolar.

La creación de la llamada "Zona Fortalecida", prevé la descongestión de los centros, siguiendo la pauta que hace unos cinco años se inició en la "Zona Electiva" de Belmont, en el área Pico-Unión, donde se abrieron varias escuelas piloto.

Sin embargo Flores Aguilar explicaó que el Sindicato de Maestros de Los Ángeles (UTLA) sólo accedió inicialmente a que hubiera 10 escuelas pilotos en el distrito, un cupo que ya se ha alcanzado con la reciente apertura de la última en Huntington Park.

La ampliación de esta cuota, que UTLA ha considerado ampliar hasta 50 sin haber tomado todavía una decisión final, será crucial para que las escuelas piloto proliferen.

"Estamos en una encrucijada que involucra a muchas partes en las que cada una trata de proteger sus intereses", dice Flores Aguilar, confiando en que, finalmente, prevalezcan las decisiones que mejoren la calidad de la enseñanza.